Por cada tonelada de vidrio reciclado se salva más de una tonelada de recursos naturales (hasta 60% de la energía necesaria si no se reciclara). Así mismo se reducen hasta en un 20% las emisiones a la atmósfera de la fabricación y contaminando un 40% menos el agua.
Lo anterior gracias a que existe un ahorro en materias primas como energía para fabricación de vidrio desde cero. Algo increíble de este material es que se puede reciclar una y otra vez sin perder sus propiedades.
El vidrio está elaborado principalmente con arena y es 100% recuperable, por lo que se puede reciclar indefinidamente sin pérdida de calidad o pureza.
La mejor forma para reciclar vidrio consiste en almacenar todo tipo de botellas, envases y demás, y después depositarlos en contenedores de color VERDE. Estos embaces deben estar limpios y libres de cualquier material como sellos o etiquetas.
Marisol Bee
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